Identidad corporativa, bases para tener un logo que represente tu firma
El logo es algo que suele subestimarse, pero, en realidad, es la cara y la primera imagen de una empresa. En general, es lo primero que las personas ven. Tanto es así que, hoy, cualquier persona es capaz de reconocer un logo, pero, además, identificarlo con un tipo de producto, con una identidad de marca, con un tipo de servicio, entre otras cosas.
Teniendo esto en cuenta, podemos decir que el logo es fundamental para la identidad corporativa de una marca, independientemente del rubro al que esta se dedique. Por eso, a continuación, te vamos a contar cuáles son las claves para lograr un buen logo que represente a la firma.
Debe ser simple
Cuando se piensa en crear un logo, se tiende a pensar que es necesario colocar una gran cantidad de elementos. Un error frecuente tiene que ver con querer que, en una imagen, aparezcan muchos elementos que hablen de distintas facetas de la marca. Un punto clave del logo tiene que ver con poder ser fácilmente reconocible y recordable. Por eso, mientras más simple sea el logo, más posibilidades hay de que las personas lo recuerden.
Tiene que ser coherente
Si bien tiene que ser simple, el logo tiene que poder representar a la marca. Por eso, es muy importante buscar que sea acorde a la identidad de la misma, a su mensaje y a su filosofía. Un ejemplo interesante para evaluar esto es el de Apple. Hoy en día, el logo de Apple y su color sobrio y relacionado a la tecnología da cuenta de la posición que la empresa tiene, hoy, como una empresa futurista e innovadora.
Debe ser original
Además de ser simple y coherente, es importante que el logo sea original y diferente a lo demás, a fin de poder ser recordable. Ya hemos hablado anteriormente respecto de esto. Uno de los objetivos más importantes de un logo es que pueda ser recordable. Entonces, mientras más impacto tenga el logo, mayores serán las posibilidades de que las personas que lo vean lo recuerden. El logo tiene que poder ser memorable, interesante, coherente y, también, simple, para quedar en la memoria de las personas.
Siguiendo lo mencionado con anterioridad, es claro que toda empresa puede observar logos que han funcionado adecuadamente. Pero es importante evitar buscar que los logos se parezcan entre sí. El logo de la marca tiene que poder ser diferente a la vez que efectivo. Debe ser original y no debe confundirse con los logos de otras marcas. No queremos que las personas tengan dudas respecto de a qué empresa corresponde cada logo.
Ser medible
Finalmente, siempre es importante medir en el mercado cuáles han sido los resultados del logo. Esto nos va a permitir tener datos para realizar cambios en caso de que ello fuera necesario. Medir los resultados de un logo es importante para poder evaluar cómo le está yendo a la marca en lo que refiere a su identidad e imagen de marca.
